El mismo día en que se confirmó
el aumento de la pobreza, que pasó del 40 al 52% en los
primeros seis meses del año, el Gobierno de Javier Milei dispuso
cambios en el Gabinete, a partir de la salida del ministro de Salud, Mario
Russo, quien será remplazado por Mario Lugones.
De acuerdo con la Oficina del
Presidente, Russo presentó su renuncia por cuestiones personales, aunque la
salida se da en medio de un feroz ajuste que también alcanza a la Salud.
De acuerdo con la periodista Rosario
Ayerdi, Russo "presenta su renuncia mañana y aseguran que es por
temas personales y que no lo echaron aunque venía con algunos cruces con
Santiago Caputo por el manejo del Ministerio".
Salud es una de las áreas en las
que el Poder Ejecutivo realiza una profunda revisión del personal contratado.
Junto a los ministerios de Justicia y Capital Humano, acumula más de 70 mil
contratados cuya vinculación formal vence a fin de septiembre, según confirmó
el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien dijo que todos esos puestos
se encuentran en evaluación.
Quién es Mario Russo
Antes de ejercer como titular de la
cartera sanitaria en la presidencia de Milei, Mario Russo fue secretario de
Salud en los municipios de San Miguel y Morón.
Graduado de la Universidad Nacional
de Buenos Aires, Russo es especialista en cuidados perioperatorios de cirugía
cardiovascular y tiene una reconocida trayectoria de casi una década en FLENI.
El próximo exfuncionario estuvo en
el ojo de la tormenta a principio de año, durante el brote de dengue en
Argentina, por la nula gestión del Gobierno ante la problemática.
Entonces protagonizó una curiosa entrevista en la que responsabilizó
del asunto a "los laboratorios, los medios y la casta", a
quienes acusó de presionarlo.
Todos los cambios en el Gobierno de Javier Milei en 10 meses
La primera baja del Gobierno
fue Guillermo Ferraro, en enero de este año, tras haber sido señalado como
responsable de filtrar información sensible de sus reuniones a distintos medios
de comunicación.
Ferrero, que estaba a cargo del
disuelto Ministerio de Infraestructura, duró apenas 1 mes y 15 días en
el cargo, y se convirtió en el ministro que menos duró desde el
inicio de un gobierno democrático.
Al poco tiempo, en mayo, fue el
turno del entonces jefe de Gabinete, Nicolás Posse, quien a pesar de
conocer a Milei desde hacía muchos años por su rol como ejecutivo de
Aeropuertos Argentina 2000, fue obligado a renunciar por una serie de
cortocircuitos con la secretaria general de Presidencia, Karina Milei.
El lugar de Posse fue ocupado por
el ministro de Interior, Guillermo Francos, que pasó a ocupar doble
función.